Hey Baby ♪ 6

Al otro día llegué cinco minutos tarde al trabajo. Fue todo normal, la rutina de ponerme el uniforme, recibir gente, tomar su pedido, llevarlo a la cocina, tomar sus platillos y llevarlo hasta sus mesas; eran actividades de todos los días. Incluso las personas groseras ya eran una rutina. Fue hasta la noche que llegó Richard por mí. El restaurante tuvo bastante clientela durante el día, era sábado, esa era la razón del cansancio de todos. Richard llegó cinco minutos antes de mi salida y aunque salí todavía diez minutos después de la hora de salida, él esperó de pie afuera de su auto. Esta vez vestía un pantalón de mezclilla azul, zapatos negros, camisa blanca y un suéter gris.  Cuando salí del restaurante lo saludé.

- Hola Richard – le dije sonriendo y estrechando su mano

- Hola Eli – dijo dándome un beso en la mejilla y abriendo la puerta de su auto para que subiera. Subí, cerró la puerta y dio la vuelta para subir.

- Cómo estás? – preguntó mientras cerraba la puerta del auto

- Bien, gracias; un poco cansada – dije mientras pasaba mis manos hacia mi nuca

- Umm, pues, quieres que te lleve a tu casa entonces? Tenía planeado ir por algo para tomar y luego ir al puerto, pero podemos ir después si quieres. – dijo metiendo la llave del auto para encenderlo

- Sinceramente, prefiero ir a tomar un té – dije riendo un poco – tengo todo el día de mañana para descansar y un café me animará un poco.

- Segura? No hay problema, en serio, podemos ir la otra semana si quieres – dijo un poco preocupado

- Si, no hay problema, además, todavía no anochece completamente, pero parece que el cielo estará despejado y solo se verá la luna llena. – dije viendo hacia el cielo

- Ok, entonces vamos – dijo mientras encendía el auto – mi plan es ir por un té o café, pedirlo para llevar y luego ir al puerto y sentarnos a la orilla para platicar, no hemos tenido la oportunidad de charlar bien y por eso te pregunté si podía venir por ti, te gusta mi plan?

- Está perfecto – dije viéndolo a los ojos con una sonrisa, sus ojos eran lindos. – No tengo quien me espere en casa y no tengo ningún problema; mis padres llaman en la tarde, ni cuenta se darán.

- Vives sola? Eso significa que no eres de aquí… de dónde eres?

- Vengo de Lancashire, de hecho Frida también es de allá, nuestros padres se conocen y aunque ellos querían que viviéramos juntas nosotras tomamos la decisión de que viviendo solas seríamos más independientes.

- Ah… por eso su acento se me hacía un poco diferente al nuestro. – dijo sonriendo – entonces vinieron por la escuela, me imagino, no?

- Sipi, la universidad de aquí es mejor que la de Lancashire; además de que Liverpool es una ciudad linda, y menos peligrosa que allá – dije riendo un poco

- En eso tienes razón, cuanto llevan aquí?

- Ammm… poco más de un año. Quisimos llegar un poco antes del inicio de curso para conocer nuestros rumbos y así ya no tener problemas para andar solas por la calle.

- Esa fue buena decisión, las calles de aquí son algo complicadas al principio – respondió riéndose. – pues, aquí pediremos algo, que quieres?

- Um, un té de limón con leche, por favor.

- Vale, espera aquí, no te vayas eh… - dijo en tono bromista – voy por ellos y regreso

- Ok, aquí espero. – respondí mientras él bajaba del auto

Mientras esperaba recosté mi cabeza un poco y cerré los ojos. Pensaba en que había bastante tarea por hacer para el lunes, ya tenía que pagar renta la próxima semana y cosas sin sentido que no tenían nada que ver con lo que estaba viviendo en ese momento. Minutos después, Richard regresó con dos vasos.

- Me detienes los vasos por favor? – dijo por la ventana

- Claro – dije mientras tomaba los vasos para que él subiera al auto – todo bien?

- Sip, es que había mucha gente, ya sabes, fin de semana y es hora que muchos salen de trabajar

- Cierto, bueno… gracias por el té - dije sonriendo

- De nada – respondió con otra sonrisa – ahora, vamos al puerto

- Ajam… - contesté, y desde ahí se hizo un silencio corto – tu qué pediste?

- Ah un café con leche – dijo mientras detenía el auto – aquí es; espera, no te bajes, yo te abro la puerta.

Bajó del auto y abrió la puerta, tomó un vaso y me dio una mano para que yo bajara. Caminamos hacia una pequeña banca que estaba enfrente del auto para sentarnos y tomar nuestros tés.

- Entonces tu si eres de aquí? – le pregunté

- Si, yo nací en uno de los barrios más pobres de Liverpool, ahora vivo en un barrio no tan malo, pero lo importante es andar caminando por las calles, no?

- Sip – contesté y después le di un trago a mi bebida. Otra vez se hizo un silencio, ahora más largo; ya era de noche y la luna se reflejaba el agua del puerto donde estábamos, parecía que a él le gustaba cómo se veía la luna esa noche; era en verdad hermosa, grande y brillante, su luz se reflejaba en sus ojos claros. Richard era el tipo de chico callado y un poco tímido al principio. Yo era igual, pero al parecer tenía que ser  yo la que iniciara la conversación y así lo hice.

- Entonces, cuántos años tienes? – pregunté

- Pues, tengo diecinueve años recién cumplidos, y tú?

- Ou, yo tengo 18 años. Entonces cuando los cumpliste?

- La semana pasada, el 7 de Julio, y tú?

- Genial! No tiene mucho! Pues, yo los cumplí hace casi tres meses, en abril

Hey Baby ♪ 5

Durante el camino hacia la casa de John y de Manuela de repente se quedaron callados, aunque después John nos preguntó:

- Y a qué se dedican ustedes?

- Ah pues ambas estudiamos, pero yo estudio arquitectura y Eli estudia idiomas – respondió Lily

- Arquitectura? Yo te veía cara de cineasta – dijo John entre risas – e idiomas… no es algo pesado Eli? Puedo decirte Eli, cierto? – continuó dirigiéndose a mí.

- Si, puedes decirme así, solo si me dejas decirte Johnny, vale? – le respondí con poco de risa

- Tú, Lily y todos los que me caen pueden llamarme como quieran – dijo poniendo una cara de niño tierno – pero entonces, contéstame, es difícil lo que estudias?

- No del todo, en la facultad donde estudio eliges mínimo 2 idiomas. Además es interesante porque conoces un poco de cultura de los que eliges – le dije

- Prefiero ser un vago con una guitarra tocando en un bar – respondió John con risa

- Perdón que interrumpa – dijo Lily – ahora hacia donde?

- Ammm, hacia tu izquierda por favor – le dijo John con una sonrisa – Manu, quieres que vaya a dejarte hasta la puerta de tu casa? sabes que por mí no hay problema.

- Como quieras John, no me va a pasar nada si no me vas a dejar hasta la puerta

- Pero siempre he querido ir a dejarte a tu puerta – dijo John con ojos de niño pequeño pidiendo algo

- Ok, puedes ir a dejarme – le dijo Manu con una sonrisa

- Genial! – dijo John riéndose – ah! aquí está bien Lily, la casa de la blanca es la de Manuela y la de la izquierda es la mía, pueden venir cuando quieran, Ok?

- Está bien John, gracias – respondió Lily estacionándose

- Gracias a ti pequeña, ya es noche y Manuela molestándote con venir a dejarnos – dijo John mientras Manu abría la puerta y él la veía con una mirada molesta y juguetona.

- Descansen, tengan buena noche – les dije

- Igualmente, dulces sueños – nos dijo John

- Nos vemos pronto chicas! – dijo despidiéndose Manuela

- Bye! – dijimos Lily y yo

- No nos vamos hasta que ambos estén dentro de sus casas – les dijo Lily

- Ok, corramos Manu, ya es tarde para que dos mujercitas lindas anden en la calle – dijo John casi empujando a Manuela

Ambos caminaron y John abrazó a Manu de forma tierna hasta que llegaron a la puerta de ella, se veían tiernos, eran muy buenos amigos y se notaba. Manuela sacó las llaves del pequeño bolso negro que llevaba y entró a su casa, no sin que John le diera un beso en la mejilla. John atravesó el patio de la casa de Manu para ir a su casa, cuando pasó junto al auto se despidió moviendo la mano y haciendo una mueca; llegó a su puerta y sacó las llaves del bolsillo del pantalón de mezclilla que vestía y entró a su casa. Lily encendió el auto y nos marchamos; durante el camino ella se veía pensativa e iba callada, lo cual era raro, ella es el tipo de chica que le gusta platicar de lo que sea donde sea.

- Qué te pasa Lily? – le pregunté – estás algo extraña

- Ah, nada Eli, es solo que estoy algo cansada, manejar no es cualquier cosa - respondió

- No, a ti te pasa algo, te conozco. Puedes manejar hasta tres horas sin sentirte cansada y ahora no llevas ni treinta minutos. – le contesté

- A veces odio que me conozcas tan bien, sabes? – dijo riéndose

- Te dije! – Respondí – Sabes que si quieres puedes contarme

- Sip, gracias Eli… pues es que, no sé… Paul se me hizo lindo, me gustó su forma de ser, y él, físicamente, no es feo – dijo algo sonrojada y riéndose

- Eeeh, te gustó el niño Paul – dije codeándole y riéndome también – pues sí, es lindo, pero podemos ir a visitarlos después si quieres

- Sí… me gustó, pero no lo digas – respondió mientras se fijaba por donde manejaba y reía

- Ok, no diré nada. Sabes? También George es lindo, su cara de niño es tierna y sé a quién le puede gustar un chico como él – dije riéndome

- Ah, pensé que te había gustado el pequeño George

- No… - respondí – me gusta otro chico, pero necesito conocerlo más. De hecho también lo conocí apenas, ayer fui a verlo al Iron Door, también tiene banda

- Oh! genial! qué tienen los chicos músicos que nos fascinan?

- No lo sé, pero son lindos – respondí para terminar sacando la lengua

- Oh si… bueno Eli, ya estás en casa – dijo Lily estacionando el auto

- Gracias Lily, te veo el lunes en el colegio vale? Descansa y sueña lindo – dije abriendo la puerta del auto

- Igualmente Eli, descansa que mañana tienes que ir a trabajar

- Vale, bye! - dije para despedirme

- Buen fin! bye!

Hey Baby ♪ 4

John se fue y le pregunté a Manuela:

- Así se llevan, cierto?

- Si – respondió – es un bromista completo

- Ok, habrá que conocerlo más entonces

En ese momento salieron los chicos para seguir tocando; por eso ya no pudimos platicar las chicas y yo. Después de otro rato el show terminó y salimos a esperar a John para llevarlo a casa, era un favor que manu le había pedido a Lily desde antes. Cuando él salió iba acompañado de Paul y George, se acercaron y John los presentó.

- Hola otra vez – dijo John – pues estos niños querían conocerlas. Hace rato ya los presenté durante nuestra participación dentro del club, entonces solo las presentaré a ustedes… no es mi problema si ustedes no recuerdan cómo se llaman estos pequeños picarines, Ok?

- No seas grosero, John – dijo Paul dándole un golpe en el hombro – preséntanos bien

- Deja de ser tan formal Paul, puedo asegurarte que terminarás de novio con una de ellas – le contestó John con una mirada retadora pero bromista al mismo tiempo

- Quiero hacer las cosas bien y dar una buena impresión, no puedo? – le respondió Paul

- Basta ya, mejor los presentaré, no quiero gastar mi saliva contigo – le respondió John girando su mirada hacia nosotras haciendo una cara de mujer orgullosa – Ok, Paul, pues, a Manuela ya la conoces, ha venido muy seguido a vernos; luego, la niña linda de en medio es Lily, y la otra niña bonita es Elizabeth.

- Mucho gusto señoritas – dijo Paul estrechando mi mano y dándome un beso en la mejilla. – cuando quieran, estoy para servirles – haciendo lo mismo con Lily, aunque el beso que le dio a ella fue mas tierno

- Mucho gusto Paul – respondí sonriendo

- El gusto es mío Paul; mejor dicho, nuestro – dijo Lily con risa

- Ya, ya… ahora, éste es George. Aquí voy otra veeeeez… - dijo con un gesto de un poco de desesperación - a Manuela ya la conoces, la pequeña de en medio es Lily y la damita de junto es Elizabeth

- Es un gusto pequeñas, al igual que Paul, estoy para servirles – dijo George solamente dándonos la mano

- El gusto es nuestro George – respondí

- Bueno, ya es un poco tarde y el pequeño George tiene que llegar a su casa, no crees Paul? – dijo John

- Mejor dinos que quieres que nos vayamos – le dijo George

- No, por mí pueden quedarse aquí toda la noche… pero tenemos que descansar para mañana, recuerda que trabajaremos todos los días.

- Ok, vámonos entonces Paul, este maleducadito no nos quiere aquí… - dijo George

- Vale, vamos al auto. Descansen mujercitas, espero verlas pronto – nos dijo Paul sacando las llaves de su auto

- Hasta luego! – le respondimos las tres

- Adiós chicas!! – nos dijo George

Se fueron y John tuvo que regresar al club por un accesorio de su guitarra. Cuando regresó nos fuimos todos al auto de Lily para ir a dejar a John. Lily, obviamente, iba al volante y a su lado iba yo. En la parte de atrás iban John y Manuela platicando sobre los chicos. Algo de lo que pude escuchar es que George es el más chico de los tres, hasta ese momento entendí porqué John le dice –pequeño- a George, es porque tiene 16 años. Tal vez ese sea otro de los motivos por los que John dijo que ya era un poco tarde para que anduvieran en la calle a esas horas de la noche. Paul tiene 17 años, el talento musical viene en su sangre porque su padre es músico de jazz. John, el chico líder estaba a punto de cumplir 19 años.

Hey Baby ♪ 3

Regresé al trabajo y unas horas después llegó Lily para irnos al Casbah. Lily tocó el claxon unas 3 veces como señal de que ya estaba ahí. Salí, subí a su auto y en la parte de atrás había una chica, la vi, le saludé y luego saludé a Lily.

- Hola pequeña – dije mientras subía al auto

- Hola Eli! cómo te fue?

- Muy bien, gracias. Vino a visitarme un amigo y platicamos solo unos minutos porque tenía que regresar al restaurante. – le respondí mientras cerraba la puerta

- Oh que bien. Mira, ella es Manuela – dijo Lily señalando con la vista hacia la chica de atrás mientras encendía el auto para marcharnos.

- Hola Manuela – dije sonriente mirando hacia atrás y moviendo la mano

- Hola Eli, mucho gusto – respondió con una sonrisa

- Ella es amiga de uno de los Quarry, dice que después nos los presentará – dijo Lily

- Wow! que genial! – respondí un poco impresionada

- Sí! – dijo Manu – es John, somos vecinos y aunque casi no está en su casa nos llevamos muy bien

- Suena ser un chico divertido – contesté

- Si, ya lo conocerás en un rato – respondió con un guiño

Después de unos minutos, llegamos al club y no había mucha gente, estaba casi vacío a comparación del Iron Door. El Casbah era un club que se encontraba en el sótano de una pequeña casa, era un lugar de ambiente familiar. Pedimos una cerveza para cada una y comentábamos cosas de la escuela y minutos después tres chicos con guitarras salieron al pequeño escenario del lugar para tocar algo de rock & roll aunque estuviera prohibido. Al terminar la primera canción, el chico que al parecer era el líder dijo:

-Hola a todos. Pues, primero quiero agradecerles su presencia, y en segunda, aunque creo que algunos de ustedes ya nos conocen, quiero presentarnos porque veo dos caras nuevas – mientras su mirada se dirigía hacia donde estábamos – a mi derecha está el pequeño gran George Harrison y a mi izquierda se encuentra Paul McCartney; y yo, yo soy John Lennon, nosotros juntos somos The Quarrymen y seguiremos tocando, disfruten.

Nosotras seguimos tomando nuestra cerveza y después de un rato los chicos decidieron darse un descanso. John se acercó para saludar a Manuela diciendo:

- Hola pequeña vecina mía, se te ofrece algo? otra cerveza, un cigarro o algo?

- Hola Johnny – respondió Manuela – así estoy bien, aunque sí necesito algo, pero no te lo diré – dijo sonriendo

- Ok, ya quedará en ti, yo cumplí en atenderte como el niño bueno que soy

- No bromees John – dijo Manuela riéndose

- Entonces me puedes presentar a tus amigas, por favor?! Eres una maleducada

- Oh si, perdón! Pues ella es Lily y ella es Elizabeth

- Mucho gusto niñas amigas de la niña maleducada de Manu – dijo John haciendo una reverencia moviendo un pie hacia atrás y agachándose un poco, tomando su pantalón como si fuera un vestido

- El gusto en nuestro John – dije haciendo una reverencia con la cabeza

- Seguras que no quieren nada? También puedo ser mesero!

- Que no John! – respondió Manuela

- No inventes Manu, no seas grosera y agresiva – dijo Lily con risa

- Ves! ella si me comprende – contestó John dirigiéndose hacia Manu

- Lily, es que deberías conocerlo bien! – dijo Manu

- Ok, Ok… mejor me iré con los chicos a seguir tocando, ellos si me entienden! – dijo con mirada retadora y graciosa hacia Manuela – a la salida nos vemos, vale?

- Sí, ya! ve a tocar – le contestó Manu

Hey Baby ♪ 2

Al siguiente día llegué a la escuela tarde y el profesor de mi primera clase no me dejó entrar al salón y tuve que quedarme afuera hasta que terminara la clase. Durante esas dos horas caminé para no aburrirme y encontré a Lily en los pasillos de la escuela:

- Hola Lily! Como te va?
- Que tal Eli? Pues a mí me va bien, y a ti? – contestó extrañada, sabe que a esa hora siempre tengo clase y no acostumbro perder clases
- De hecho bastante bien, a excepción de que acabo de perder una clase por llegar tarde, pero lo demás está muy bien. – dije con un poco de risa

- Que bien! Yo tengo esta media hora libre, ya sabes, los profesores nos dejan salir antes de clase para descansar un rato. Oye, por cierto, ahora que te veo, hoy en el Casbah Coffee tocarán The Quarrymen, quieres ir?

- Hoy? –dije algo confundida, al otro día no había escuela, pero tenía que trabajar.

- Sí, creo que será a las 8,  si quieres paso por ti al trabajo y nos vamos al club. – contestó Lily

- Ok, tengo dos días para hacer tarea – diciendo que sí moviendo la cabeza

- Vale, a qué hora paso por ti?

- Puedes 7:30 por favor?

- Claro! Oye, debo irme, tengo clase en 5 minutos. Te veo más tarde, ok? – dijo con una sonrisa

- Ok, buen día! Bye!

Más tarde en el trabajo mientras esperaba un platillo en la cocina, uno de mis compañeros de trabajo, Mark, se acercó y dijo:

- Alguien te busca en la entrada.

- Ah sí? Quien?

- No lo sé, es un tipo bajito – dijo con un tono algo apurado por que el también estaba esperando un platillo.

- Ok, ahora voy, gracias – dije mientras tomaba el platillo. 

Cuando salí de la cocina vi que estaba ahí afuera, vistiendo un pantalón oscuro, un suéter claro y fumando un cigarrillo. Fui a dejar la comida a la mesa y salí solo por un momento para saludarlo.

- Hola Richard – dije sonriendo

- Oh, hola Elizabeth – dándome un beso en la mejilla – cómo estás?

- Vale – respondió – oye, puedo venir mañana por ti?

- Ah, si quieres, salgo un poco tarde – dije con algo de risa – saldré 7:30

- Ok, no importa – contestó – pues, creo que deberías regresar a trabajar. Te veo mañana, vale? – dando un paso hacia atrás para ya irse

- Sipi, aquí te espero – respondí – buen dia!

- Igualmente Eli  – levantando la mano derecha y moviendo sus dedos en señal de despedida con una sonrisa en su rostro

Hey Baby ♪ 1

Fue en abril de 1959 cuando lo vi por primera vez. Él iba acompañado de un grupo de amigos al restaurante donde yo trabajaba como mesera para pagar parte del colegio. Iban cada semana por algo de comer, siempre con mochilas, al parecer les gustaba mucho irse de pinta e ir coqueteando con cuanta chica se les atravesaba, aunque casi no daban buenos resultados.

Él era de estatura media, de tez blanca, cabello café y un par de ojos azules muy lindos a la vista. Parecía ser el tipo de chico alegre y de buen carácter; amable y cariñoso con las personas que él estima; el chico que da lo mejor de sí.

Una tarde soleada de Julio me llamó para ordenar una hamburguesa y una soda para cada quien. Llevé el pedido a la cocina, lo recibí y fui hasta su mesa para dejarlo. Un rato mas tarde, se acercó para pagar lo que habían pedido y de repente preguntó:
- Harás algo esta noche?. - Fue sorpresivo realmente, porque las únicas conversaciones que teníamos eran para preguntar qué querían y ellos pedían.
- Creo que no - contesté - solo iré a casa después de trabajar.
- Bueno, los jueves los chicos y yo tocamos en el Iron door, a unas 3 calles de aquí, quieres ir? - dijo algo apenado.
- A qué hora?
- A las 9 de la noche, me gustaría que fueras, si quieres puedes llevar a alguien para que te acompañe.
- Ok, veré qué puedo hacer - le dije con una sonrisa
- Vale, te espero. - dio vuelta y dejó el restarutante para alcanzar a sus amigos.

Durante un buen rato tuve que pensar muy bien si ir o no, ya que al día siguiente había escuela temprano. Terminé por llamar a Frida para ir juntas al Iron Door. Más tarde llegamos a dicho club para ver a aquél chico y su grupo tocar. El lugar era pequeño y estaba lleno de gente, con mucha música y poca luz; por más que Frida y yo quisieramos platicar era prácticamente imposible. Dando las 9 la gente empezaba a aclamar a Rory Storm and the Hurricanes, quienes salieron a escena unos minutos despues, comenzaron a tocar algo de skiffle, algo que hacían muy bien. El chico de ojos azules vestía pantalón y zapatos negros y camisa blanca. Tocaba la batería de un modo especial, de lo cual muchos se daban cuenta; era tan bueno que anunciaron su solo de batería con 'Startime!'.

Después de 3 horas el show terminó. A la salida del club Frida y yo comentábamos lo que no pudimos ahí dentro, cuando escuché que gritaban 'Hey!' y no dí importancia, podrían llamarle a cualquier persona; 'tú! la chica del restaurante!', giré la mirada y era el chico ojiazul. Me detuve para esperarlo, cuando se acercó nos saludó:
- Hola! Que gusto que hayas, bueno, hayan venido
- Sí, decidí venir y fue muy bueno, tú y los chicos tocan muy bien.
- Gracias, me alegra que te haya gustado - dijo un poco sonrojado
- Y me gustó mucho... oye, disculpa, tenemos que irnos, es algo tarde - dije mirando a Frida
- Oh, si quieren puedo ir a dejarlas. Traigo auto, algo viejo, pero funciona - dijo con un poco de risa
- Seguro? Es a unas calles del restaurante.
- Claro, suban - contestó abriendonos muy amablemente la puerta trasera de su auto

Subimos al auto y los tres ibamos en silencio; aunque después de un rato Frida preguntó en voz baja:
- Oyeee, y cómo se llama?
- Hey, buena pregunta, no sé - dije entre risas
- Jaja, tonta...
- Espera, le preguntaré.
Él iba muy atento a la calle por donde manejaba cuando dije:
- A todo esto, cómo te llamas?
- No me he presentado?! - dijo algo sorprendido y apenado viéndome por el retrovisor
- No...
- Perdón, soy un grosero. Me llamo Richard
- Richard, qué?
- Starkey... y ustedes damitas?
- Ah, mucho gusto Richard. Ella es Frida y yo soy Elizabeth.
- Mucho gusto Richard - dijo Frida
- El placer es mío, señoritas - contestó él - pues, ya estamos cerca del restaurante, ahora hacia donde?
- A la izquierda - le dije - en el quinto edificio vivimos.
Se estacionó enfrente del edificio donde Frida y yo vivimos, bajó del auto y nos abrió la puerta
- Aquí están señoritas - dijo
- Gracias por traernos - constesté
- De nada, al contrario, gracias por ir a vernos al club. Nos vemos la otra semana en el restaurante, o tal vez antes - dijo haciendo un guiño
- Buenas noches Richard, descansa, que tengas buenas noches - dijo Frida
- Hasta luego! - contestó él
- Un gusto conocerte - dije moviendo la mano para despedirme de él mientras Frida y yo subiamos las escaleras para entrar al edificio

Cuando se fue, Frida preguntó
- Cómo lo conociste? es simpático el muchachito
- Pues, él y sus amigos del grupo van al restaurante cada semana por algo de comer, y hoy me invitó a ir a verlo al club donde fuimos. Parece ser que es lindo.
- Si, me di cuenta, te brillan los ojos - dijo Frida con una risa un poco burlona
- Argh bueno ya déjame - contesté con risa - vayamos a nuestro respectivo departamento y vayamos a dormir - le dije  aguantandome la risa
- Ok... pero te gusta! - contestó con risa - descansa, buenas noches
- Déjame! - le respondí - dulces sueños, bye!

Intro :B

Bueno pues, este fanfic es el primero que escribo. Su enfoque será (como los demás) como un recorrido en la vida de Ringo, desde cuando tocaba en Rory Storm and the Hurricanes hasta su época Beatle, pero también lo haré sin caer en escribir una biografía. La historia comienza en 1959 y se irá desarrollando poco a poco; envolverá a los 4 Beatles y también gente especial que me rodea. Espero les guste la idea, lean el primer capítulo y si les gusta, sigan leyendo :3